La enseñanza budista del Dzogchen, introducida en el Tíbet por Padmasambhava, explica que, en cierto modo, la iluminación se da ya aquí; ni siquiera la meditación es necesaria, pues no se trata de cambiar la percepción de las cosas sino de reconocer la pureza de la mente. No existen dos tipos de conciencia diferentes, la iluminada y la ignorante: sólo existe una conciencia. Dicho de otro modo, estamos liberados ya. Sólo se trata de reconocerlo. 

La doctrina Dzogchen es considerada por sus seguidores como la enseñanza definitiva y más secreta del Buda. En el presente libro, rindiendo homenaje a la singularidad del Dzogchen, el Dalai Lama lo sitúa dentro del ámbito más amplio del budismo tibetano en su totalidad. Explica la esencia de la práctica del Dzogchen, extrayendo de esta sus afinidades y diferencias con las tradiciones del Yoga tántrico más elevado. Asimismo, aquí se desvela por qué se le llama al Dzogchen la culminación de todos los vehículos y cuáles son los principios básicos de los otros caminos budistas que un practicante de Dzogchen debería conocer. 

En suma, Dzogchen es tanto un extraordinario testimonio de la sabiduría y el polifacético carisma del Dalai Lama como una amenísima introducción a una de las enseñanzas más antiguas y profundas del budismo tibetano. 

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